Pequeño pulmón verde en la ciudad donde conviven fuentes, numerosas especies vegetales y un conjunto escultórico, siendo una de las figuras más representativas la del hondero balear. De estilo historicista a la manera de los jardines árabes. Destaca el arco que sobrevuela el estanco y que probablemente conducía desde la fortaleza hasta el mar. Es una agradable zona de paseo y de descanso en Palma de Mallorca (Baleares) que recoge toda la luz que proviene de la fachada marítima y permite disponer de vistas sobre el mar y hacia el castillo de Bellver.