A mediados del siglo XIX Caldetes fue uno de los destinos de veraneo más tradicionales de la burguesía barcelonesa. A partir de 1883, cuando construyó su torre el segundo marqués de Comillas, se inicia la época dorada de Caldes, y muchas otras familias adineradas levantan sus chalets a pie de playa. A partir de 1917 se inicia la urbanización del paseo de los Ingleses y el famoso casino Colón. Testigo de aquella época de esplendor son algunos de los chalets modernistas y novecentistas que han llegado a nuestros días, la mayor parte construidos entre 1915 y 1920.