Posiblemente uno de los barrios más populares de la ciudad de Sevilla, está situado en la orilla este del río Guadalquivir y está unido a la ciudad por el Puente de Triana, que sustituyó al antiguo Puente de Barcas. Poseedor de una identidad propia, al mismo tiempo, refuerza la idiosincrasia de la capital sevillana, con su apego a tradiciones como la Semana Santa o el flamenco. Son muy características de Triana las casas de vecinos o corrales y la cerámica, y en él han nacido numerosos artistas, cantantes, bailaores y toreros.